YuYu Hakusho -Fanfic- La Puerta del Diablo. Capítulo 19: Comienza el Juego

                                             


Sinopsis del anime: La serie narra la historia de un joven rebelde de 14 años, Urameshi Yūsuke, quien es atropellado en un accidente de tráfico por salvar a un niño. Su muerte no debía ocurrir todavía, y por tanto no hay sitio para él ni en el Cielo ni en el Infierno, así que deberá ir al Más Allá y, en calidad de fantasma, recuperar su cuerpo y vencer todo tipo de demonios y seres fantasmagóricos acompañado de sus fieles amigos.

LA PUERTA DEL DIABLO


Trama:
 Un codicioso empresario está buscando la forma de gobernar el mundo, y qué mejor manera que abriéndole las puertas al diablo en el Templo de Genkai.
Género: aventura, artes marciales, drama, acción, fantasía, humor
Pareja: ninguna
Calificación: para mayores de 13 años
Cantidad de palabras por capítulo: variable
Duración: 30 capítulos
Estado: completo
Año de creación: 2006
Publicado originalmente en: Fanfiction
Autora: Gabriella Yu
Mi estilo: estoy influenciada tanto por el anime, los dramas asiáticos y la literatura universal. Me gusta hacer pasar a los personajes por duras pruebas para sacar los mejor de ellos. ¡Nadie es perfecto, todos podemos ser mejor!

Capítulo 19: Comienza el Juego

Cuando ya todos estuvieron reunidos frente al laberinto y el demonio guía se había reunido con ellos, Yusuke vio el primer desafío y no le gustó para nada.

-¿Qué rayos es esto? –Se preguntó Yusuke bastante confundido ante la entrada del laberinto –Aquí hay dos puertas. ¿Por cuál entraremos?

Ante el grupo se alzaban dos puertas sin picaporte y que solamente tenían un horrendo cráneo en el centro de cada una de las puertas.

-¿Qué significa esto, demonio estúpido? –Exigió Kuwabara tomando al pequeño ser por las alas y estirándolo.

-¡Ay! ¡Suéltame! ¡Son las Puertas del Destino!

-Explícate. –Pidió Genkai.

-Solo una de las puertas es la correcta, la que permite la entrada al laberinto, la otra es la entrada a la dimensión de los demonios, si escogen mal esa dimensión los absorberá a todos.

-Pero no sabemos cuál es la correcta. –Dijo Kuwabara preocupado.

-Ése se supone que es el desafío, tonto. –Suspiró su hermana un tanto molesta por la estupidez de su hermano.

-¡Cállate Seiryu! –Protestó su hermano.

-¿Cómo es este acertijo? –Preguntó Genkai.

-Los cráneos están vivos y pueden hablar. Uno de ellos siempre miente y el otro siempre dice la verdad. Ustedes solamente pueden formular una sola pregunta a uno de los cráneos para saber cuál puerta tomar.

Casi todos se miraron un poco perplejos, menos Genkai, Kurama, Toguro y Hiei.

-¿Qué vamos a hacer? –Kuwabara se puso histérico -¡Es un problema muy difícil! No sabemos cuál miente y cual dice la verdad.

-Cállate y escúchanos, sólo así aprenderás. –Ordenó Genkai.

Todos se reunieron alrededor de Genkai y Kurama para escuchar sus conclusiones, excepto Toguro y Hiei, que se mantuvieron al margen. Luego de un cruce de opiniones, Kurama y Genkai decidieron probar suerte, la anciana le permitió al muchacho hacer la pregunta. Kurama se acercó con paso seguro a una de las puertas y procedió a hacer la pregunta.

-¿Si yo fuese a entrar por esta puerta tu compañero me diría que SI es la correcta?

El cráneo miró a su otro par, luego miró a Kurama y contestó.

-No.

-Entremos por esta puerta. –Dijo sin titubeos el joven haciendo referencia hacia la puerta en dónde había hecho la pregunta.

-¿Estás loco Kurama? –Protestó Yusuke. –Esa cabeza dijo que no.

-Entremos de una vez. –Ordenó Genkai y procedió a abrir dicha puerta, y para el asombro de casi todos, era la correcta.

-Veo que por lo menos dos de ellos son muy inteligentes. –Sonrió Io Akuma interesado. –Esto se está poniendo interesante.

Cuando ya todos estuvieron en el interior del oscuro y tenebroso laberinto, Botán se acercó a Kurama para sacarse una duda.

-¿Cómo lo supieron?

Con su habitual tranquilidad, el muchacho le respondió con una bonita sonrisa.

-Escucha bien Botán: Digamos que la puerta a al cual me dirijo es la correcta. Si el que me contestaba era el mentiroso hubiera respondido que NO. Pues como la otra puerta (que es la que dice la verdad) hubiera respondido que SÍ, entonces él (que miente) respondería que NO. –Hizo una pausa –Si el que contestaba era el cráneo que decía la verdad hubiera respondido que NO también, ya que como su compañero (que es el que miente) respondería que NO, entonces (él que no miente) respondería que NO.

-¿Pero y si la puerta que habías elegido era la equivocada? –Preguntó la chica.

-Entonces la respuesta de cualquiera de ellos será SÍ.

-Por lo tanto, -agregó Genkai –si la respuesta era NO indicaba que la puerta que debía tomar era a la que le hacía la pregunta, y si la respuesta era SÍ indicaba que esa era la puerta que no debía tomar.

-¡Oh! ¡Ustedes son tan inteligentes! –Exclamó Botán entusiasmada.

-Si te pones a meditar un rato y a aquietar tu mente y centrarla en un solo pensamiento, tú también resolverías estas cosas. –Le dijo la anciana.

-¿Usted lo creé? –Se emocionó Botán. Genkai asintió con la cabeza sonriendo.

Pasaron unos minutos más caminando por un largo corredor casi a oscuras, cuando se tropezaron con una bifurcación.

-El camino se divide aquí. –Dijo Yusuke -¿Cuál tomaremos?

Pero en ese mismo momento, una enorme esfera de piedra apareció por el principio del corredor y fue rodando velozmente hacia ellos. Todo pasó tan rápido que a nadie le dio el tiempo necesario de pensar y decidir el camino a seguir juntos, ya que los obligó a que cada uno se dirigiera por uno de los dos corredores sin pensarlo siquiera. Cuando ya todos escaparon por ambos corredores, la gran piedra se estrelló contra la bifurcación y las entradas quedaron selladas, separando en dos al grupo. Yusuke, Hiei, Genkai, Toguro, Koenma y Ogri era uno de los grupos, el otro grupo lo conformaban Kurama, Kuwabara, Botán, Keiko, Shizuru, Mori y Tanaka. Y ambos grupos se comportaron a su manera.

-¡Rayos! –Protestó Yusuke después de haberle lanzado un ReiGun al enorme obstáculo sin hacerle ningún rasguño–Ya no podremos reunirnos.

-¡Estamos perdidos! ¡Buuuaaaaa! –Lloriquearon abrazados el príncipe Koenma y su sirviente Ogri.

-¡Diablos! ¿Por qué tengo que estar con estos tontos? –Protestó Hiei.

-Sigamos adelante. –Ordenó Genkai.

Toguro los seguía en silencio observando la relación entre Genkai y Yusuke, le parecía extraño que ambos no hubieran cruzado palabra alguna desde que se habían vuelto a reunir.

Y en el otro corredor, los demás también se preocupaban.

-¡¡Yuske!! –Gritó Keiko afligida golpeando con su puño la roca. La chica tenía a Puu que estaba muy preocupado en su otro brazo.

-No te preocupes, Keiko –Shizuru trató de tranquilizarla poniéndole una mano en el hombro. –Yuske estará bien, ya sabes que él puede cuidarse solo, además, Genkai está con él.

-Ya lo sé. –Asintió Keiko preocupada –Pero ellos dos no se hablan, están peleados.

-Sigamos nuestro camino. –Dijo Kurama. –No se preocupen que todo saldrá bien.

-Eso espero. –Suspiró Botán –Si ellos dos no se arreglan ahora será difícil que lo hagan más adelante.

-¿No-nosotros vamos con ustedes? –Preguntó Mori dubitativo.

-¡Claro que no! –Exclamó Kuwabara enojado –Gracias a ustedes estamos metidos en este lío.

-Sí pueden venir. –Dijo Kurama.

-¡¿Qué?! ¡Pero Kurama! –Protestó su amigo.

-Si los ayudamos a salir vivos de esto, prométanme que le devolverán su templo como estaba a la maestra Genkai y jamás la volverán a molestar. –Los ojos de Kurama brillaban con un dejo de severa advertencia.

-¡Prometido! –Asintió Mori sin pensarlo dos veces. Tanaka nada dijo, pero parecía estar de acuerdo.

-Bueno, entonces sigamos adelante. –Dijo Kurama

-Llegó la hora de hacer el primer sorteo. –Dijo Io Akuma al ver que ya habían pasado los quince minutos, se levantó de su asiento y se dirigió al bolillero el cual luego lo hizo girar él mismo. Y en un instante salió una esfera de cristal.

–Baya baya, es una mujer. –Sonrió malignamente.

Kurama, Kuwabara, Keiko, Botán, Shizuru, Mori y Tanaka estaban caminando por una serie de pasajes cuando de repente Shizuru desapareció ante la sorpresa de todos.

-¡Seiryu! –Gritó Keiko preocupada mirando hacia todos lados.

-¿Qué fue lo que pasó? –Preguntó Botán asustada.

-Ya se cumplieron los quince minutos. –Dijo Kurama seriamente.

-¡¡NO!! –Gritó Kuwabara -¡¿Quieres decir que mi hermana ahora es una zombi?!

Kurama bajó la vista y el pobre muchacho comprendió lo que le quería decir.

-¡¡NOOOOO!! ¡¡HERMANAAAAAA!! ¡¡¡MALDITOOOOOO!!! –Kuwabara cayó llorando de rodillas al suelo, muy adolorido.

Keiko se puso a llorar, Botán abrazó a Kuwabara, Kurama seguía con la cabeza gacha y los demás solo miraban sin llegar a comprender totalmente el dolor del muchacho.

Continuará...


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